Nos alcanzó octubre

Ciudad de México, 5 de octubre de 2020.

Por Nidia Sánchez

La vida en rosa (columna)

Recién nos alcanzó octubre y en los aparadores de varias tiendas en el centro de la Ciudad de México, ya se siente el Día de Muertos, en una combinación extraña con una Navidad adelantada, por mucho, entre grupos de mariachis que hacen del ambulantaje una tertulia callejera.

El comercio es imparable como la vida, decenas de personas caminan con la consigna de acelerar sus compras y regalos, luego de que en los aparadores se ven descuentos de hasta el 50 por ciento, que enamoran a primera vista a quienes tienen los recursos en sus bolsillos.

Algunos altares ya incitan a las compras compulsivas, moviendo emociones y añoranzas, entre quienes se detienen a disfrutar de un altar colorido.

El escaparate es atractivo en una conjugación de Navidad, Día de Muertos y Hallowen, donde se asoman simpáticos espantapájaros en la vía pública.

Aunque la venta ha vuelto a las calles y los establecimientos están abiertos, atrás quedaron los días en que la muchedumbre se desplazaba con la fuerza de una avalancha. Quedan espacios libres en las banquetas, lo que no ocurría antes de que el COVID 19 se apoderara del globo terráqueo.

Las ofertas están a la orden del día, solo que esta vez, los dueños intentan no perder y las rebajas son tentadoras.  

Es claro para muchos que el flujo de compras y ventas no ha sido lo mismo desde hace meses. Este último trimestre la invitación es al consumo de productos, obsequios e ilusiones, que para muchos quedará solo en deseos y en la imaginación.

Oscar Manuel Rodríguez Ochoa, luy6618@hotmail.com